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HONRANDO NUESTRAS RAÍCES.
Itziar Aguirre


Psicoespacio surge en el año 2004 en Bilbao como Centro de Desarrollo Humano orientado a potenciar las habilidades y recursos a través de la Terapia Individual, Cursos de Formación y el Arte como expresión natural de los procesos psicológicos. Empezó desde su origen participando en proyectos de Inteligencia Emocional de la Diputación Foral de Gipuzkoa en colaboración con Sycom y en proyectos de Psicoterapia del arte basado en las experiencias docentes y artísticas de Begoña Intxaustegi, parte relevante en el impulso de este Centro.

Este mismo año se incorporó la Pedagogía Sistémica CUDEC y el enfoque de Bert Hellinger a la orientación de este espíritu creativo, desarrollando fuertes vínculos con México cada vez más sólidos y comprometidos en proyectos comunes avalados y apoyados por el grupo CUDEC.

Hoy Psicoespacio es un Centro que en estos momentos está muy en sintonía con esta mirada transgeneracional y sistémica, dedicándose, entre otras actividades, a la supervisión de casos escolares e intervención terapéutica familiar sistémica si procede.

Por otra parte en estos momentos  desde Psicoespacio se está organizando el Diplomado y el Master de Pedagogía Sistémica CUDEC en el País Vasco.

Ya en el  año 2005, en colaboración con Isabel Odriozola Directora del Centro Jarein en San Sebastián,  se propuso a Angélica Olvera la puesta en marcha del Diplomado, algo que ella aceptó y tras varios cursos de sensibilización en Pedagogía Sistémica, en los que se iba enraizando esta nueva propuesta educativa, dio comienzo el nuevo Diplomado.

La historia de la llegada de Pedagogía Sistémica al País Vasco se inició el 12 de enero de 2008, haciéndose realidad así un proyecto que había estado gestándose durante este tiempo.

Se inició una colaboración con el grupo CUDEC que iba más allá de una formación académica, se inició un espacio en el que los Ordenes del Amor de Bert Hellinger adquirían  cada vez más protagonismo en la actitud de los participantes  y a su vez tenían su propio movimiento acompañando a los contenidos programados.

El enfoque fenomenológico de la Pedagogía Sistémica ha logrado que los diferentes Diplomados evolucionaran adaptándose al contexto del País Vasco, siendo testigos de su propia evolución y de cómo el espacio se interrelaciona con la información que va proponiendo cambios a medida que profundizamos en las necesidades de los docentes, de su alumnado y de las Familias. Así, el proyecto para el Diplomado del 2011, contempla la necesidad de abordar temas de interés como son el duelo y la sexualidad en el aula y dotar de recursos dentro de la Pedagogía Sistémica para abordar las distintas situaciones que se plantean en la escuela.

Hasta la fecha llevamos tres promociones de Diplomados, (actualmente en curso la tercera) con un total de 65 alumnos, la mayoría profesores vocacionales con distintas funciones dentro del contexto educativo, abriéndonos a la posibilidad de que se incremente el interés por la Pedagogía Sistémica cada vez más.

Este año hemos dado un paso más en el proyecto y el 16 de enero de 2010 se inició el Master con alumnos de las dos promociones anteriores. Incorporamos una nueva iniciativa inclusiva que tenía como objetivo cohesionar a los miembros del grupo de Diplomado y darles una acogida por parte de los participantes del Master y así comenzamos las dos formaciones al mismo tiempo en forma de Residencial impartidos por Angélica y Alfonso. La experiencia de lograr vínculos de pertenencia a un mismo grupo se fraguo compartiendo espacios lúdicos, distendidos y comunes que ofrecía el Centro, mientras que cada uno ocupaba su lugar en los diferentes espacios formativos.

La experiencia mostró la importancia que tuvo esta mirada transmisora de una misma experiencia entre dos generaciones diferentes pues el grupo del Diplomado ha surgido con una fuerza vinculativa que antes no observábamos hasta prácticamente el Residencial.

Como partícipes del Proyecto Educativo de Pedagogía Sistémica CUDEC, estamos investigando en varios campos de aprendizaje contribuyendo a la expansión y profundización de este gran proyecto que se origina en México impulsado por Angélica Olvera y Alfonso Malpica en base a su experiencia educativa. Desde la psicología y la educación estamos observando la trascendencia y los efectos que tienen los Ordenes del Amor aplicados en la Educación, mostrándonos la importancia de esta mirada de inclusión y respeto hacia lo que es.

Desde la asesoría y formación a Centros Educativos y Servicios Sociales llevamos a cabo proyectos de investigación centrados en los Principios de la Pedagogía Sistémica como son el ordenamiento de funciones en los diferentes sistemas y contextos. Un ejemplo de la relevancia que tiene el Orden en la Estructura de Funciones es, como hemos observado en investigaciones recientes, el incluir dentro de las funciones educativas al Personal de Servicio como educadoras en la tarea en uno de los objetivos que plantea la  educación como es la socialización del alumnado. Constatamos desde esta experiencia que su inclusión como tal en el ámbito educativo mejora las relaciones de este grupo con el equipo directivo asumiendo con más responsabilidad sus distintas funciones en comedores, transporte escolar… así desde la Pedagogía Sistémica se constata, una vez más, cómo el ambiente de trabajo mejora y se crea un espacio de actuación más eficaz.

El propio ámbito de investigación fenomenológica abre nuevas posibilidades de explorar territorios que van desde la mera recogida de experiencias hasta las intervenciones pedagógicas o la publicación de textos que aporten nuevas comprensiones basadas en el conocimiento empírico. Actualmente estamos inmersos en un proyecto de formación de Pedagogía Sistémica en Herri Arrasate Eskola (Mondragón) (700 alumnos) con el 98% de participación del profesorado en un Claustro de cerca de 60 personas, sin contar con la formación del Personal de Servicio y de los Padres y Madres de familia.

También los Servicios Sociales de los Ayuntamientos ocupan un lugar destacado en la selección de proyectos desde nuestro centro en los que se están abriendo colaboraciones con Departamentos de distintos municipios de Bizkaia que solicitan formación, asesoramiento y supervisión de casos.  

Nuestra energía está presente en la  profundización del Diplomado y del Master, recogiendo las experiencias que nos van aportando las distintas promociones y planteando un nuevo comienzo conjunto para el próximo año  2011 validando el aprendizaje de este curso.

En esta mirada también queremos reconocer a los impulsores;  Angélica Olvera, y Alfonso Malpica, y a todos los formadores y colaboradores que hacen posible la diversidad de este proyecto educativo aportando desde otros centros del resto de España sus propias experiencias e investigaciones,  a quienes agradecemos desde estás líneas; José Antonio García (León), Amparo La Moneda (Zaragoza), Maita Cordero (Madrid) y Mercé Traveset (Barcelona) y con ellos a todo el equipo CUDEC que forman una sólida base en la que nos apoyamos.